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jueves, 24 de noviembre de 2011

Otro relato para Relatos Brevísimos Mimosa

Caída libre

Oigo los gritos de los vecinos pidiendo que no lo haga. Mi madre, a mis espaldas, suplica mi clemencia pero yo ya estoy dispuesta; así que la balanceo cogida por las orejas y canturreo,
-la tiro o no la tiro, la tiro o no la tiro...-
¡Hecho! La lanzo por los aires mientras observo cómo cae en mitad del patio. Tan solo unos segundos de suspense. Por fin se mueve, está viva. Un suspiro de alivio recorre la manzana. Y triunfal me giro y le digo,
-ves Mamá como si que tienen siete vidas.-









11 comentarios:

Cristina. dijo...

Ay Dios mío ! Quizás eso fue lo que pasó una vez que a mi me cayó un gato encima arañándome todo el hombro. Que susto me di. Y los gatos, si no les tiran se caen solitos, porque mira que les gusta el peligro.

Gala dijo...

Jajajaja, que malvado!!
Y es que los niños son así.. solo quieren experimentar...
No hay nada mejor que poner las cosas en práctica para comprobar la certeza de las mismas... aunque en esta ocasión.. el pobre gatito sufriera las consecuencias..

Genial el micro.
Precioso...

Besitos mediterráneos...

Rosa dijo...

Jajajaja, pero que malvada...

Besos desde el aire

Sara Lew dijo...

Pobre gatita. Puede que tenga siete vidas, pero así terminará llegando quebrada y tullida hasta la última.
Estos niños, que si no lo prueban, no lo creen...
Besos.

Nicolás Jarque dijo...

Ana, que niño más c... jeje. Pero bueno en su defensa se puede esgrimir que estaba ante un experimento científico en aras de descubrir las siete vidas de los gatos.
Me gustó mucho.
Bessets.

TORO SALVAJE dijo...

Que majos son los niños...

Besos.

Sara Lew dijo...

Hola Ana: Tengo algo para mandarte pero necesito tu dirección de e-mail. Puedes escribirme a la mía, que figura en mi blog, así te lo envío. Sorpresa :-)

Maite dijo...

Cómo nos has engañado, Ana. Primero parece que el niño se tira, pero el lector piensa: "quiá, no es eso", luego parece que puede tirar un juguete, pero desde luego nada con vida, y al final, zas!, nos das en el cogote con el gato, y he sufrido por él, porque no me lo esperaba. Besos!!

Laura dijo...

Ahora mismo : aviso a la madre de la hija, amiga de un niño travieso que conozco, para que... ¡esconda al gato!.

Muy bueno Ana, yo también creía que el crío se lanzaba al vacío, aunque era de esperar que diera un giro.

Un abrazo des-
demispalabrasylasvuestras.

Elysa dijo...

Un tal Nicolás Jarque al que he tenido el placer de conocer hoy me ha recomendado tu blog, me ha dicho que me gustaría y sí lo que he leído me ha gustado, me quedo.

Besitos

Javier Ximens dijo...

Jeje, valiente hp que es el muchacho. Va para científico, por lo de prueba y ensayo.Pero me has hecho creer que era él o algún hermano.